Una voz que marcó varias generaciones

Murió Juan Alberto Badía

El locutor y conductor Juan Alberto Badía falleció esta madrugada 15 minutos pasada la media noche, tras padecer un cuadro de neumonía y cáncer. Estaba internado en el Hospital Austral. Trabajó 38 años en los medios, tanto en solitario como con amigos.

Últimamente, Badía, había mostrado una importante mejoría, que este año incluso le permitió volver a la actividad, después que fue diagnosticado en 2010 de cáncer de mediastino, en 2010, atravesar dos importantes cirugías y un tratamiento intenso durante todo el año 2011.

En el centro asistencial se encontraban su esposa Mariana, sus tres hijos, Carla, Bárbara y Juan Agustín, sus hermanos Marisa y Carlos y sus amigos Marcelo Tinelli, Julio Lagos y Fernando Bravo, entre otros.

Recordado por una infinidad de ciclos de radio y televisión, había sido homenajeado en mayo último por la Asociación de Periodistas de la Televisión y Radiofonía Argentina (APTRA), con un Martín Fierro a su trayectoria.

Badía fue uno de los profesionales de mayor y merecido renombre tanto de la radiofonía como de la TV local, de probada y honesta creatividad, que impulsó a nuevos talentos, y supo con sus ciclos dar varias vueltas de página a la historia de los medios locales.

Nacido el 24 de noviembre de 1947, Badía recordaba que cuando era niño en Ramos Mejía, con su hermano solían jugar a ser locutores y para eso armaban un improvisado estudio de radio donde practicaban imitaciones y ponían música exitosa de entonces.

Su padre era Juan Ramón Badía, un respetado maestro y profesor de locutores poco entusiasmado con que su hijo siguiera sus pasos, cosa que finalmente ocurrió, cuando en 1966 se inscribió en la carrera del Instituto Superior de Enseñanza Radiofónica (ISER).

Eran los tiempos en que Los Beatles eran furor en el mundo y también aquí, entre la juventud argentina y entre ellos al mismo flamante locutor que tras matricularse en 1970, y hacer una suplencia en Radio Antártida, saltó a la fama.

Rivadavia, El Mundo y finalmente en Del Plata, su media hora dedicada a Los Beatles, los sábados en «Modart en la noche», y un ciclo diario que hizo historia como “Imagínate-Flecha Juventud”, que en la década del 70 habría de convertirse en un suceso.

Dedicado a un público adolescente -y algo más- que esperaba ansiosamente la cita nocturna con los grandes del rock nacional y, obviamente, el grupo de Liverpool que lo obsesionaba, se convirtió rápidamente en un verdadero clásico.

Allí se escucharon en sus momentos de gloria a Sui Géneris, es decir a Charly García y Nito Mestre, a David Lebón, la trova rosarina a pleno y toda la pleyade de artistas que había logrado llevar al rock nacional a su mejor momento, una popularidad en la que el locutor y especialista tuvo un protagonismo fundamental.

De “Badía y Compañía”, su ciclo televisivo sabatino que ocupó por años el espacio dejado por Nicolás “Pipo” Mancera, crecieron y surgieron figuras como Carlos Mellino con su Profesor Lambetain, Marcelo Tinelli, Silvina Chediek, Pepe Eliaschev, y hasta el finalmente jefe de gobierno porteño Jorge Telerman.

En televisión también fue revolucionario y exitoso su ciclo nocturno “Imagen de radio”, donde volvió a la carga con viejos y nuevos amigos en un estudio de radio escenográfico en directo, donde demostró que una vez más, su enorme amor por el “fierrito” (tal como se le dice al micrófono en la jerga de los locutores).

Allí se reveló por primera vez en la pantalla chica la mística de los estudios de radio al filo de la medianoche, revelando a sus protagonistas en cuerpo entero, y entre otros guiños se popularizaron sus habituales pedidos al «switcher master».

Entre 1989 y 1991 fue director de la entonces Radio Ciudad ya ubicada en el 110 del dial, tarea que también desarrollo en su propia emisora Estudio Playa (98.19), con estudios en la misma palaya de Pinamar, éxito por varios años consecutivos, emisora a la que este mismo año volvió con el diario “Pinamar para amar”.

También estaba al frente de otra emisora, en Parque Laguna Fantasma, Bariloche, la KMFM 96.5, Kilómetros de Radio, en la que de 21 a medianoche emitía en simultáneo su emisora web documental JABRadio, donde ofrecía música en vivo y viejas grabaciones.

En 2008 condujo junto a Federica País, el ciclo nocturno de los sábados «Séptima noche», con presentaciones de artistas locales e internacionales, así como entrevistas, que apenas tuvo un paso discreto por la pantalla de Canal 7.

Por Canal 7 llevó adelante varias temporadas del ciclo “Estudio País”, con el que interconectó a toda la geografía argentina en simultáneo, con un panel de jóvenes periodistas y conductores en cada uno de los paisajes elegidos.

En 2011 fue convocado por Claudio Villarruel para conducir “Mi noche favorita”, por el canal Web 360TV y este año, para intervenir en el ciclo del Trece “Este es el show” donde entrevistó a Charly García. Badía creó una radio por la Web, JABRadio, en cuyo Twitter participó hasta el 22 de junio último.

Badía recibió el Konex como conductor en 1991 y 2001, el Martín Fierro por “Una buena idea” en 1992, “Imagen de radio”, en 1995 y “Badía en concierto”, en 2007, antes del de Trayectoria y el nombramiento personalidad de la cultura en la Legislatura porteña.

Amante de Los Beatles y de todo lo que tuviese que ver con sus integrantes, en 1990 publicó “El día que John Lennon vino a la Argentina”, publicado por Editorial Sudamericana.

En los últimos tiempos, tras recibir varias propuestas para escribir un libro acerca de esta última difícil etapa, aceptó la de editorial Planeta para producir uno con la recopilación de los encuentros y entrevistas más importantes de su carrera.

Sobreviven al locutor y periodista, impulsor del rock nacional y la «Beatlemania» en la Argentina, su esposa Mariana, y a sus tres hijos, Carla, Bárbara, y Juan Agustín.

Paso a paso

Oriundo de Ramos Mejía, provincia de Buenos Aires, nació en 1947 y a los 20 años el inquieto Juan Alberto ya era ayudante de cámaras. Tres años después comenzaba Imaginate Flecha Juventud , una propuesta radial que marcó la década que se mantuvo al aire.

Allí el confeso fanático de los Beatles le regalaba un segmento especial a su audiencia con media hora de «beatlemanía» plena de temas exclusivos y anécdotas. Ahí mismo comenzó a tener la costumbre de nombrar autor e intérprete de los temas para que fuera más sencillo dar con el single en la disquería, en un gesto claro que colaboró con la difusión de la música que tanto amaba.

Le siguió Piedra Libre, donde le abrió la puerta a Marcelo Tinelli, actualmente monstruo del rating. En los 80ÂŽs llegó la consagración. Badía&Cía fue el nombre del programa ómnibus que se convirtió en cita ineludible sábado tras sábado para los televidentes. Duraba toda la tarde desfilaban todo lo novedoso y potente del rock nacional – en pleno boom- de la mano de sus protagonistas, que conversaban como en el living de la casa del anfitrión y tocaban en vivo. Luego vino Imagen de Radio, levantado de ATC a fines del 90, durante la gestión menemista. Más tarde fue el turno de Una buena idea, transmitido desde una radio rodante desde Bariloche y Ushuaia, con el que ganó el Martín Fierro en 1993.

Conducía Estudio País en Canal 7 cuando, el 9 de noviembre de 2010, se enteró de su diagnóstico. Durante casi un año se dedicó a pelear contra su enfermedad- consecuencia de 50 años de fumador-, tiempo en el que la audiencia lo acompañó afectuosamente acercándole regalos y palabras de aliento, de los que el conductor había hecho un santuario en una habitación de su casa. A fines de 2011 y luego de avanzar en el tratamiento y reducir el tumor, quiso volver a trabajar y lo hizo encabezando como conductor el ciclo de reportajes Mi noche favorita para el primer canal digital 360tv.

(Fuente: Diario Norte).

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.